día 6
María, punto de unión:
el Espíritu entra en acción.
María mantiene unidos a los discípulos a su alrededor, en actitud de espera y participa de la llegada del Espíritu Santo. Lo que será el comienzo de la Evangelización.
EQUIPO
En el equipo de hoy vamos a ver cómo los apóstoles se encontraban divididos y asustados. María esta vez es la que consigue que todos se mantengan unidos y juntos, haciendo posible que el Espíritu Santo venga sobre ellos y comience a formarse la Iglesia. Si no hubieran permanecido unidos, gracias a María, nunca se habría cumplido el plan de Dios. Hoy vamos a reflexionar sobre la unidad y el trabajo en equipo y aprenderemos que juntos somos más fuertes. Para empezar elegimos entre el cuento y la dinámica (o si se quiere se hacen los dos) y se reflexiona:
Un labrador anciano tenía varios hijos jóvenes que se llevaban mal entre
sí, peleaban constantemente. Un día les congregó a todos y mando traer
unas cuantas varas, las colocó todas juntas e hizo un haz con ellas, les
preguntó cuál de ellos se atrevía a romperlo. Uno tras otro todos se
esforzaron para lograrlo, pero ninguno pudo conseguirlo.
Para reflexionar: - ¿He tenido alguna experiencia parecida a la de la historia? - ¿Estoy de acuerdo con lo que se dice en la historia? - ¿Busco estar unido a los demás o soy de los busca separarse y enfrentar a todo el mundo? ¿Ayudo a que el grupo permanezca unido?
Para reflexionar: - ¿Cómo me he sentido durante el juego? - ¿Hemos seguido alguna táctica? ¿Por qué creo que ha funcionado/ no ha funcionado? - ¿Me he parado a escuchar a los demás? ¿He participado aportando ideas? - ¿Qué enseñanza se puede sacar de todo eso?
Ahora vamos a leer unas lecturas del evangelio en la que nos cuentan qué pasó ese día de Pentecostés y cómo María ayudó a todos estuvieran juntos orando.
Hch 1, 14.
14Todos ellos perseveraban unánimes en la oración, junto con algunas mujeres y con María, la madre de Jesús, y sus hermanos.
Hch 2, 1-11: La venida del Espíritu Santo.
1Al cumplirse el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar. 2Y de repente sobrevino del cielo un ruido, como de un viento que irrumpe impetuosamente, y llenó toda la casa en la que se hallaban.3Entonces se les aparecieron unas lenguas como de fuego, que se dividían y se posaban sobre cada uno de ellos. 4Quedaron todos llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les hacía expresarse. 5Habitan en Jerusalén judíos, hombres piadosos venidos de todas las naciones que hay bajo el cielo. 6Al producirse aquel ruido se reunió la multitud y quedó perpleja, porque cada uno les oía hablar en su propia lengua. 7Estaban asombrados y se miraban diciendo: -¿Es que no son galileos todos éstos que están hablando? 8¿Cómo es, pues, que nosotros les oímos cada uno en nuestra propia lengua materna? 9Partos, medos, elamitas, habitantes de Mesopotamia, de Judea y Capadocia, del Ponto y Asia, 10de Frigia y Panfilia, de Egipto y la parte de Libia próxima a Cirene, forasteros romanos, 11Así como judíos y prosélitos, cretenses y árabes, les oímos hablar en nuestras propias lenguas las grandezas de Dios.
Ahora toca explicar un poco (sin detenerse mucho porque no es el objetivo principal del equipo) en la persona del Espíritu Santo y sus dones y frutos. A modo de resumen se puede explicar del siguiente modo:
Viendo el dibujito se entiende cómo es Espíritu de Dios nos ayuda a cumplir mejor el plan de Dios para nosotros. Él nos inspira para que seamos mejores cristianos, sabiendo lo que tenemos que hacer en cada momento, lo que tenemos que decir y uniéndonos más al Señor. Como a los apóstoles en ese día, a quiénes les dio la propiedad de hablar en diferentes lenguas, así el Espíritu nos ayuda a nosotros a proclamar que Dios nos quiere con locura. Sin Él seríamos como un globo deshinchado, que necesita ‘’aire’’ para poder cumplir con su misión. Ese aire, es el Espíritu, a quién representamos con forma de Paloma. Gracias a María, que con su esperanza y cariño hizo que todos estuvieran unidos en oración, el Espíritu vino e hizo posible que la Iglesia se expandiera. ¿Por qué no le pedimos a María que nos mantenga unidos y que nos ayude a conocer al Espíritu? ¿Le rezamos juntos a María, como los apóstoles en Pentecostés?
Rezamos todos juntos la siguiente oración:
Ven, Espíritu divino,
Ven, dulce huésped del alma,
Entra hasta el fondo del alma,
Riega la tierra en sequía,
Reparte tus siete dones
Después de todo lo que hemos hablado, toca decidir qué voy a hacer para estar más cerca del Señor. Por ejemplo; - Me comprometo a pedirle a María, cuando rece, que nos mantenga unidos y que nos queramos mucho. - Que yo sea elemento de unión en mi grupo y no de separación o de enfrentamiento. - Me comprometo a rezar todos los días la oración del Espíritu Santo. - Voy a pedirle al Espíritu que me ayude a estar más cerca de Dios. - Etc…. Que cada uno piense qué compromiso ponerse.
Para terminar, le rezamos juntos a María un Ave María.
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